La
profesora de lengua estaba convencida
empezad
siempre por buscar el verbo,
el
verbo y lo demás,
la
palabra más importante,
el
núcleo.
Repetía
y repetía ad infinitum.
Cantar, comer, vivir, pensar, morir.
Eso
hicimos
empezamos
por el verbo:
yo como / tú cantas / él vive / ella
piensa /
nosotros moriremos qué remedio...
La
recordamos con cariño al fin y al cabo
pero
a estas alturas de la clase
poco
a poco nos inclinamos
por la humilde trascendencia de los complementos
cómo,
cuándo,
dónde
y
sobre todo…
con
quién.
Quizá con el tiempo lleguemos a la puntuación: puntos, comas, signos de interrogación...
ResponderEliminar...puntos suspensivos...
...
Un abrazo.
Qué bueno¡¡
ResponderEliminar:)
Buenos días, Miguel. Ayer estuve escuchándote en el recital del Tapas y Fotos y con tu permiso me voy a llevar algunos poemas al blog que manejo desde hace años. Un abrazo, Ángel.
ResponderEliminarMiguel, como ya te dije estuviste espléndido. Emocionas, diviertes e inspiras.
ResponderEliminarEnhorabuena y espero seguir mucho tiempo en el mismo camino que arrancamos hace casi un año!
Un beso!